Crucial victoria en el Cívitas Metropolitano del Atlético de Madrid que se enfrentó a un gran Feyenoord que venía como líder del grupo y tras una victoria ante el Celtic de Glasgow. Partido con muchos goles con Morata, Griezmann y Jan Oblak como protagonistas.
El Atleti encajó el primer gol del partido muy rápido, en el minuto 6 Ueda se quedaba mano a mano con Jan Oblak tras un genial pase filtrado, el meta esloveno sacaba el disparo con la pierna con la mala suerte de que el rebote daba en Mario Hermoso y se dirigía a la propia meta rojiblanca, gol.
No tardaba mucho en recomponerse el conjunto madrileño del gol recibido. Rodrigo De Paul veía a Saúl al que le servía un gran pase pero que no llegaba ya que el defensa tocaba y habilitaba a Álvaro Morata para batir a Wellenreuther con un disparo pegado al palo. Gol del madrileño para el empate, no marcaba en Liga de Campeones desde el año 2021 con un gol en Anfield que hizo que el Atlético derrotara al Liverpool en su casa.
Dejando glorias pasadas a parte, el partido continuaba poniéndose gris para los locales. Primero en el 30' con un disparo de Paixao que ponía a prueba a Jan Oblak, el arquero sacaba con las dos manos el balón abajo y mandaba el esférico a córner. A balón parado llegaba el 1-2 del equipo neerlandés, Hancko remataba obligando a Oblak a realizar una parada estratosférica pero con la mala suerte de que el rebote le llegaba de nuevo a Hancko.
El Atleti de nuevo se recomponía rápido y lo empataba en el último minuto del primer tiempo. Balón de Samu Lino al área para que tras unos rebotes en los defensas y en Witsel le llegase el balón al principito que de media chilena lo empataba y levantaba al Metropolitano.
Se dice que los mejores minutos para marcar son justo antes del segundo tiempo y al principio del mismo, pues eso mismo hicieron los colchoneros. Grandísimo centro de Nahuel Molina a Álvaro Morata que remataba en plancha con los pies por delante y remontaba el partido.
Los siguientes minutos se iban a convertir en un auténtico infierno para el Atleti que iba a encontrarse sostenido por Jan Oblak. En el 60' Stengs se quedaba solo ante el arquero esloveno tras una gran jugada combinativa del cuadro holandés, Jan Oblak salía y detenía el disparo con el brazo y dejaba la ocasión en un mero susto.
Yankuba Minteh se iba a encontrar solo ante Jan Oblak tras un gran pase, salía rápidamente y sacaba la pierna para evitar el gol del africano. La mejor parada de la noche estaba reservada para el mayor susto posible, el último minuto. Despiste en defensa que acaba en un disparo genial a la escuadra al que Jan Oblak respondía con una gran mano que valía tres puntos vitales.
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